Para entonces el ejército de Batista, a las órdenes del general Eulogio Cantillo preparaba una amplia ofensiva sobre los rebeldes. El 3 de mayo se realizó una Reunión en Altos de Mompié del Movimiento 26 de Julio, que resultó clave y en la que fue drásticamente reorganizado para imponer la hegemonía de Fidel Castro y del grupo de la sierra por encima de los integrantes del llano.