En 2003 fue duramente criticado, cuando, a pesar de su trasplante, consumió públicamente varios spritzer (una mezcla de vino y agua, típica del Reino Unido). Naybet y Donato llevaron el miedo a la grada arriesgando demasiado en un cruce dentro del área con caída de Tamudo incluida. En los siguientes años prosiguieron los partidos amistosos y los campeonatos provinciales. Solo habían pasado cuatro años desde su fundación, pero el Real Club Deportivo de la Sala Calvet era ya con todo derecho un Grande de España.